De la pubertad a la menopausia, cambios en la boca
Es costumbre para las mujeres estar sometidas a constantes cambios hormonales. Con la edad, también surgen cambios. Hoy hablaremos de los cambios en la boca de las mujeres desde la pubertad a la menopausia. La boca de la mujer atraviesa varias etapas que la hacen más sensible. Estos cambios pueden ser hormonales, o darse en épocas como el embarazo o la menopausia. Todo esto se ve reflejado en la sonrisa, haciéndola más vulnerable. Desde BORDONCLINIC recomendamos mantenernos alerta para que no pierda su brillo y su salud y para esto os contamos cuáles son los posibles problemas bucodentales en las distintas etapas vitales de la mujer y qué hacer para prevenirlos año tras año.
LA PUBERTAD
Una época marcada por los cambios hormonales es la pubertad. La adolescencia afecta significativamente tanto a los dientes como a las encías. Esto se debe al incremento de estrógenos y progesterona, que aumenta la circulación sanguínea en las encías, lo que potencia la respuesta inflamatoria a la placa bacteriana, a esto se le llama “gingivitis puberal”. Suele ser transitoria y reversible.
La pubertad es también una época marcada por las nuevas experiencias, como empezar fumar, que puede causar enfermedad de las encías, caries dental, halitosis, etc.; los famosos piercings, que pueden provocar retracción de las encías, desgaste y hasta fracturas en los dientes; o la aparición de trastornos alimentarios, que pueden generan caries, periodontitis, boca seca, hipersensibilidad, etc.
LA MENSTRUACIÓN
Cuando las mujeres se desarrollan, pueden aparecer síntomas de gingivitis justo antes de su menstruación, la llamada “gingivitis menstrual”. Esto, entre otras cosas, puede causar sangrado e inflamación en las encías y úlceras en los carrillos.
Otro asunto son los anticonceptivos orales, como la píldora, que contienen una cantidad de hormonas sintéticas similares a los estrógenos y la progesterona. Este tipo de hormonas pueden causar un aumento de la inflamación de las encías.
EL EMBARAZO
Durante esta etapa, las encías sufren, pues alrededor de un 75 % de las embarazadas sufre gingivitis entre el tercer y el octavo mes. Las encías se presentan rojas, inflamadas y sangrantes debido a la acumulación de placa bacteriana y está potenciada por los cambios hormonales y vasculares propios del embarazo. Si no se trata debidamente, puede empeorar el estado a periodontitis o piorrea.
Los cambios en la composición y flujo de la saliva que se producen durante el embarazo también aumentan el riesgo de caries dental, pues dificultan la neutralización de los ácidos de la boca y la reparación del esmalte. Los vómitos característicos del embarazo, también pueden debilitar el esmalte.
LA MENOPAUSIA
La menopausia es un periodo de cambios importantes para la mujer. Las encías están muy débiles, lo que puede provocar gingivitis y periodontitis. Esto es debido a que el cuerpo reduce los niveles de estrógeno y de progesterona, produciendo una reducción de la densidad ósea y la aparición de la osteoporosis y limitando el efecto antiinflamatorio de estas hormonas en la encía.
Durante la menopausia las glándulas salivales segregan menos saliva, desencadenando xerostomía o síndrome de la boca seca. También el consumo de medicamentos puede provocar sequedad bucal, lo que se traduce en dificultades para masticar, tragar o hablar, boca reseca, halitosis… La menor presencia de saliva hace que la boca de la mujer quede más desprotegida y aumente el riesgo de caries. De la misma forma, durante la menopausia puede aparecer el síndrome de la boca ardiente: por una sensación de ardor intenso y quemazón en la boca y afecta mayoritariamente a las mujeres postmenopáusicas.