Ortopnea: ¿qué es y cuál es su influencia en la salud oral?
Cada uno de nuestros órganos y tejidos corporales no son elementos aislados de otras partes anatómicas, ni tampoco están a salvo de la influencia ambiental. Todos ellos dependen en gran medida y pueden verse afectados, tanto positiva como negativamente, por su interacción con otros elementos o circunstancias externas. En consecuencia, algunos desequilibrios causados por enfermedades en una parte de nuestro cuerpo pueden incidir en otras.
Relación entre la salud oral y la salud general
El ámbito de la salud oral no es una excepción para el postulado anterior, pues si bien gran parte de las alteraciones que pueden presentarse tienen carácter local (al ser causadas en los tejidos bucales y afectar directamente a estos), también es cierto que hay una gran variedad de condiciones que provienen de la alteración del funcionamiento de otros órganos y producen consecuencias negativas sobre nuestras estructuras bucodentales.
Es oportuno indicar que esta relación es bilateral, ya que es común que algunas afecciones generadas en la boca o los componentes internos de esta puedan complicarse hasta tal punto que se dirijan a otras partes del cuerpo, como el corazón o los pulmones, generando graves perjuicios. Diagnosticar las condiciones desfavorables que merman nuestro bienestar oral y tratarlas a tiempo tiene una tremenda importancia a la hora de prevenir algunas enfermedades sistémicas.
Ortopnea
La literatura odontológica ha dejado evidencia suficiente sobre el efecto de una enfermedad denominada ortopnea en nuestra salud bucodental. En este sentido, cabe destacar que la misma tiene orígenes extraorales, pero puede causar importantes efectos sobre nuestra cavidad bucal. Por lo general, estas afectaciones pueden surgir como producto del tratamiento seguido para mitigar la ortopnea y no de la enfermedad en sí misma.
A continuación, te daremos más detalles sobre esa enfermedad tan común y te explicaremos su relación con tu salud bucodental.
¿Qué es la ortopnea?
La ortopnea es el nombre que se le ha dado a la situación que se presenta cuando una persona siente dificultades al inhalar adecuadamente aire y se encuentra acostada boca arriba (decúbito supino) en una superficie plana. Esto genera, en los casos más graves, sensación de asfixia, mientras que en los más leves solo existe cierta incomodidad a la hora de acostarse en dicha posición.
Muchos pacientes que padecen dicha alteración pueden recurrir a la utilización de varias almohadas para tener una mayor elevación de sus cabezas o adoptar una posición semi sentada a la hora de dormir. En estas posiciones sienten que mejoran sus capacidades respiratorias de modo significativo.
En ocasiones, la ortopnea puede presentarse exclusivamente cuando la persona duerme, haciendo que se despierte repentinamente con dificultades para respirar. Esta última situación se conoce como disnea paroxística nocturna y también suele presentarse de forma recurrente.
¿Cuáles son las causas de la ortopnea?
Detrás de la ortopnea se pueden encontrar causas muy diversas, tanto derivadas del estilo de vida de las personas afectadas, como de posibles alteraciones psicológicas y/o psiquiátricas de las vías respiratorias o del corazón. El correcto diagnóstico del desencadenante de la enfermedad es muy importante a la hora de determinar el curso de acción que se debe seguir para tratarla.
Causas psicológicas-psiquiátricas
En algunas ocasiones, la ortopnea puede estar precedida por ataques relacionados con trastornos de ansiedad o pánico, los cuales se caracterizan por la presencia de miedo extremo sin ningún desencadenante aparente. En paralelo, suelen mostrarse algunos síntomas físicos, como aumento de las palpitaciones, sudoración fría, falta de aire y mareos, entre otros.
Causas pulmonares
Desde el punto de vista de las enfermedades pulmonares que pueden motivar la presencia de la ortopnea, tenemos la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC, por sus siglas), el asma y la apnea del sueño. Tanto el asma como la EPOC tienen carácter crónico, por lo que su tratamiento tendrá como objetivo mitigar sus síntomas, mientras que la apnea del sueño puede corregirse a través de métodos quirúrgicos o empleando algunos dispositivos específicos.
Causas cardíacas
Las alteraciones del funcionamiento del corazón que más a menudo generan la falta de aire cuando una persona se encuentra acostada son la insuficiencia cardíaca, la tripanosomiasis americana y la enfermedad hipertensiva cardíaca. La insuficiencia cardíaca consiste en la incapacidad del corazón de ejercer un bombeo sanguíneo adecuado, mientras que la tripanosomiasis es producida por una acción parasitaria y la enfermedad hipertensiva cardíaca se debe a aspectos hereditarios.
Causas relacionadas con el estilo de vida
Si el paciente cuenta con sobrepeso, es muy probable que pueda padecer complicaciones derivadas de la ortopnea. Sin embargo, se sostiene que la obesidad por sí sola no es el desencadenante de dicha enfermedad.
Relación entre ortopnea y la merma de la salud bucodental
Uno de los principales signos que pueden dar cuenta de la existencia de ortopnea es la presencia de tonalidades azuladas o violáceas en la mucosa oral. Esto ocurre como consecuencia de la disminución en la oxigenación de las células sanguíneas, la cual tiene lugar ante la presencia de enfermedades cardíacas o pulmonares. Cuando la sangre no contiene la cantidad de oxígeno que requieren los tejidos, es muy probable que se vean afectados.
En ocasiones, la falta de la oxigenación adecuada de la mucosa oral puede producir una molesta sensación de hormigueo.
Asimismo, algunos de los pacientes que padecen dicha afección tendrán que inhalar por la boca para mejorar el paso de aire a sus vías respiratorias, lo cual puede causar alteraciones morfológicas y funcionales en la forma de la cara.
No obstante, la principal fuente de problemas de la salud oral relacionada con la ortopnea se encuentra en los tratamientos empleados para aliviar las enfermedades que han motivado su presencia. En tal sentido, es muy común emplear agonistas beta-2, anticolinérgicos y corticosteroides para hacer frente a las condiciones cardíacas y pulmonares relacionadas con ella.
Los fármacos de esas características pueden producir alteraciones graves sobre la estética, funcionalidad y nivel de higiene bucodental cuando se utilizan por tiempos prolongados. Los principales problemas asociados con estos medicamentos suelen ser xerostomía, caries, daño del esmalte dental y enfermedades gingivales. A continuación, te explicamos brevemente en qué consisten.
Xerostomía
Algunas moléculas empleadas en el marco de las acciones terapéuticas contra la ortopnea pueden generar lo que conocemos como xerostomía o sequedad bucal. Esto ocurre cuando existe una disminución de la producción de saliva por parte de las glándulas salivales.
Caries
En algunos casos, la ingesta de fármacos sumada a la sequedad bucal favorecen la aparición de caries, puesto que existe una menor producción de saliva y un mayor nivel de acidez en la misma. Esto hace que algunas bacterias nocivas proliferen en nuestras cavidades bucales, dañando el esmalte dental y provocando las temibles caries.
Daño del esmalte
Algunos de los fármacos reseñados más arriba también pueden aumentar las consecuencias generadas por el reflujo gastroesofágico, como el deterioro del esmalte dental una vez más. Esto, a su vez, puede causar el deterioro de la dentina (núcleo del diente) o la proliferación de infecciones causadas por microorganismos.
Enfermedades gingivales
La modificación en el pH de la saliva y la proliferación de bacterias en la cavidad bucal pueden crear las condiciones adecuadas para la aparición de sarro. Esta acumulación de sarro en el diente es el principal responsable de la presencia de enfermedades que afectan a las encías. Entre las patologías más frecuentes relacionadas con estos tejidos blandos encontramos la gingivitis y la periodontitis, siendo esta última de graves consecuencias para la salud general y el bienestar del paciente.
Tratamiento odontológico para las consecuencias de la ortopnea
Por lo general, la acción a seguir para eliminar los efectos producidos sobre nuestros componentes orales por parte de la ortopnea o por los medicamentos empleados para tratarla puede ser muy diversa. Todo va a depender de la naturaleza de la condición que presentemos. Sin embargo, una adecuada higiene oral es el punto de partida común para prevenirlos, así como para complementar otras opciones terapéuticas que puedan requerirse.
Si existe una sequedad bucal de reciente aparición es probable que el odontólogo recomiende la utilización de sustancias que sustituyan la saliva o sialógogos, así como evitar o disminuir el consumo de algunas sustancias que resequen el área, tales como alcohol y tabaco.
Si, en cambio, se evidencia la aparición de caries o se constata el daño del esmalte, entonces deberán aplicarse medidas restauradoras de las estructuras externas de los dientes. En algunos casos, podría darse que las caries hayan llegado a afectar las capas internas de los mismos, por lo que se requerirá de la realización de endodoncias (tratamientos de conducto).
En los casos de las enfermedades gingivales deberán seguirse una o más rutinas de limpieza profesional, las cuales pueden complementarse con medidas de raspado y alisado radicular.
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